¿Usas agua micelar? Puede que haga falta algo más.
¿Qué es el agua micelar?
El agua micelar es un limpiador que contiene moléculas surfactantes que atraen polvo y aceite. Estas moléculas surfactantes , también llamadas micelles, flotan en agua purificada y contienen una “cabeza” que atrae agua y una “cola” que atrae grasa y aceite.
¿Qué son los surfactantes?
Los surfactantes o tensioactivos, los encuentras en diversos tipos de jabones limpiadores, y funcionan como un imán que atrae aceite y elimina el sebo de tu piel.
Sin embargo, ciertas personas pueden ser intolerantes o alérgicas a los surfactantes haciendo que su piel se enrojezca, tenga picor y se hinche.
Como seguramente no quieres averiguar si eres intolerante a los surfactantes, te recomendamos SIEMPRE enjuagar tu cara después de aplicar tu agua micelar.
Además de que las micelas resudiales impiden la correcta absorción de los demás productos que apliques en tu cara. Una razón más para enjuagar tu cara, no tomará más de 10 segundos 🙂
Las aguas micelares han generado un gran furor gracias a que son muy fáciles de usar. Sólo necesitas mojar un algodón, pasarlo por tu rostro y listo.
Pero el problema es que si es lo único que estás utilizando, no estás limpiando tu cara correctamente.
Esto se debe a que
- No remueven correctamente todas las impurezas atrapadas dentro de tus poros
- Dejan una película de residuos que pueden tapar y congestionar la piel
- Pueden sólo mover la suciedad en vez de removerla
¿Es lo mismo usar agua micelar que un aceite limpiador?
No 🙁
Los limpiadores tradicionales contienen ingredientes que logran penetrar los poros y limpiarlos de una manera mucho más profunda.
El agua micelar se mantiene únicamente en la superficie de la piel, sin penetrar ni limpiar a profundidad.
Tanto los aceites limpiadores como las aguas micelares están diseñados para remover maquillaje pesado y residuos de tu rostro.
Pero el aceite limpiador está creado para remover todas las impurezas base aceite, como maquillaje, protector solar, sebo y grasa de manera profunda, limpiando completamente los poros y removiendo residuos atrapados en tu piel.
El agua micelar ayuda a remover impurezas tanto base aceite como base agua, pero no atacan las mismas impurezas y no limpia de la misma manera.
Las fórmulas de las aguas micelares son tan ligeras que no alcanzan a remover completamente un rostro repleto de maquillaje o a limpiar profundamente los poros.
También, muchas aguas micelares pueden dejar residuos en tu piel, por lo que en realidad lo único que hacen es mover las partículas de polvo y contaminación en tu piel sin removerlas de tu rostro.
Al final del día (especialmente para las mujeres que usan maquillaje) la piel necesita una limpieza más profunda. Además de que tu piel debe estar totalmente limpia para que funcionen los tratamientos y las cremas que le apliques.
¿Qué tipo de pieles NO deberían usar agua micelar?
Las pieles grasas o propensas a congestiones, brotes de acné e imperfecciones son las que más salen sufriendo al utilizar únicamente agua micelar como limpiador.
Esto se debe a que las impurezas no se remueven correctamente del rostro y a que el agua micelar puede dejar una película de residuo en la cara, la cual tapa los poros e interviene en la producción normal de aceite en la cara. Los poros congestionados se convierten en acné, puntos negros y espinillas.
También pueden ser problemáticas para las pieles sensibles, para evitar cualquier tipo de irritación te recomendamos aclarar tu piel después de aplicar agua micelar.
Ahora, esto no significa que no debas usar agua micelar. Más bien nos referimos a que no solamente uses agua micelar. Combinarla con otros productos de limpieza puede ayudar a que tengas un rostro verdaderamente limpio y libre de maquillaje e impurezas.
¿Cómo se usa el agua micelar?
El agua micelar puede ser un gran aliado para remover maquillaje pesado.Para usarla, necesitas humedecer un algodón y pasarlo por tu rostro.
Pero para asegurarte que tu rostro quedara verdaderamente limpio, tendrías que repetir este paso hasta que el algodón salga limpio. Esto nos parece un desperdicio de producto, de algodón y de tu tiempo.
Lo mejor que puedes hacer es continuar la rutina con otro limpiador, como Rooki Honey Matcha Cleansing Drops, o con una doble limpieza para un resultado más completo y una limpieza más profunda.
Nuestros favoritos para este paso son Gallinée Foam Cleanser y Dr. Gloderm TABRX Radiance Oil Capsule Cleanser. De esta manera estarás completamente segura de que no quedaron residuos en tu rostro y que removiste completamente la suciedad e impurezas.
Los contras de usar agua micelar
- Puede contener ingredientes dañinos como alcohol, fragancias y preservadores
- Sólo mueve la mugre alrededor del rostro sin removerla completamente
- No proporciona una limpieza profunda
- Deja una película de residuo que puede congestionar los poros y causar imperfecciones
Los pros
- Es fácil y rápido de usar
- Remueve todo tipo de maquillaje
- Son prácticas si vas de viaje
¿Nuestra recomendación? ¡Úsala como desmaquillante!
Usa agua micelar como primer paso seguido de un limpiador con un pH bajo o una doble limpieza para un máximo efecto de limpieza profunda.
Si usas agua micelar sola, ¡está bien! Sólo queremos que sepas algunos de los riesgos y de las limitantes que tienes al utilizar este producto por sí solo.
Al final se trata de usar lo que más te acomode.
Si usas agua micelar con un limpiador base agua, ¡mejor! Estás yendo un paso más lejos para asegurarte que tu rostro esté limpio listo para los tratamientos, mascarillas y cremas que siguen. ¡Bien ahí!
Si usas agua micelar y luego una doble limpieza, ¡EXCELENTE!
Esta es la mejor combinación que puedes utilizar. Básicamente, tu agua micelar está funcionando como un desmaquillante, siendo un primer y suave paso para comenzar a librar tu piel de impurezas y mugre.
Al continuar con un limpiador base aceite, como Dr. Gloderm TABRX Radiance Oil Capsule Cleanser, te aseguras de remover todas las partículas de aceite que quedaron en tu rostro, además de remover la película de residuos que puede dejar detrás el agua micelar.
Y por último, cerrar con un limpiador base agua, como Rooki Honey Matcha Cleansing Drops, ayudará a remover todo el polvo, contaminación e impurezas que los dos primeros pasos no alcanzaron a remover.
Hay mucha suciedad en el mundo. No dejes que se quede en tu carita.
